¿Puedes hablarnos sobre tu trayectoria hasta llegar a tu actual cargo en el club?
La verdad es que siempre desde pequeño estuve ligado al fútbol, siempre he sido uno de esos "locos" del fútbol, y siempre había tenido gran interés en la idea de gestionar equipos. Y fue aquí, gracias a los dos coordinadores, donde tuve la oportunidad de cumplir ese sueño. Se puede decir que comencé donde todo el mundo comienza y que quizá se está perdiendo: en la calle, en cualquier rincón, en mi caso en esa "plazuela" que aún envuelve a muchísimos niños.
Después, jugué en el Hergar con los amigos, para pasar más tarde 8 años en la UD. Salamanca donde aprendí todo lo que sé tanto de fútbol como de muchos otros valores, y donde conocí a grandes personas y grandes amigos. Al final por esa decisión que todos tenemos que tomar tarde o temprano, la carrera me apartó un poco de ese camino para volver a cogerlo con más ganas que nunca desde otro punto de vista que siempre me había atraído y en el que estoy teniendo una de las mejores experiencias de mi vida.
¿Cómo debe ser un buen entrenador? ¿Cuál es tu entrador de referencia?
Un buen entrenador debe ser lo primero una gran persona. Un gran conocedor de sus jugadores, y en el caso de fútbol base tratar de ser lo mejor educador posible y ser capaz de exigirle a cada jugador en función de lo que puede dar. Luego a partir de ahí, ya se trabajarán los aspectos técnicos, tácticos, etc...
Me quedo sin duda alguna con los del Benjamin A, unos cracks dentro y fuera del campo.
¿Cuál es tu objetivo para esta temporada?
Mi objetivo es que nuestros jugadores progresen y que ésta progresión sea la máxima posible. Que progresen como personas, como jugadores, como amigos, como estudiantes... Poder decir al final de temporada que el equipo ha progresado en todos estos aspectos sería nuestra mayor satisfacción.
¿Qué opinas de la actual situación del fútbol base en Salamanca?
Siento que el fútbol base actual está en un momento propicio para que clubes que están trabajando y haciendo las cosas muy bien como el nuestro vayan paso a paso mejorando y adquiriendo mayor importancia en el fútbol base salmantino después de la desaparición de la U.D.S. Es un momento importante para todos los clubes de Salamanca que quieran aumentar el nivel de su cantera y ofrecer una mejor enseñanza a los niños.